TRABAJANDO EN RED

En la Biblia, encontramos que el Señor Jesucristo, cuando llamo a sus primeros discipulos les dijo que él los haría PESCADORES DE HOMBRES. En el momento que estos pescadores recibieron el llamado, se hayaban remendando las redes que antes habían estado utilizando para pescar.

De la misma manera hoy, el Espíritu Santo nos esta convocando para que también nosotros seamos pescadores de hombres. Ahora bien, existen diferentes sistemas para pescar:

- El má rudimentario es utilizando un arpón, hecho de una rama con una punta afilada. Podemos utilizar metódos antiguos y obsoletos para pescar; sin embargo, el resultado que obtendremos, no será como lo estamos esperando.

- Otro sistema es utilizando el anzuelo donde colocando una carnada, podremos pescar almenenos un solo pes; sin embargo este sistema requiere de mucho tiempo y tampoco trae grandes resultados.

- También existe las redes, que nos permiten recoger una gran cantidad de peces al mismo tiempo. Este es el modelo que el Espíritu Santo nos esta motivando a utilizar para desarrollar nuestro llamado como pescadores de hombres.

Es por eso muy importante que comencemos desde nuestra casa, desde nuestro hogar a construir una red que nos permita capturar la mayor cantidad de bendiciones.

Para construir la red, debemos entender que el tejedor de redes es el Señor Jesucristo, quien por su Espíritu Santo nos unirá a la red correcta dándonos así la oportunidad de hacer mucho más cosas de las que por nuestra propia cuenta podríamos haber hecho.

Entendamos también que cada uno de nosotros sumados a una red, nos convertimos en uno de los nudos que fuertemente amarrados y firmes, le dá propósito y sentido a la labor de pesca.

No perdamos de vista que es muy importante darle constante mantenimiento y limpieza a la red, para que de manera más eficaz podamos cumplir con nuestra labor.

Existen acciones negativas que dañan, debilitan y destruyen la red estas pueden ser:

- Egoismo

- Contienda. murmuración y Malicia

- Rebeldía, Rebelión, inconformidad

- Mentira, medias verdades, calumnias

- Avaricia, Tacañería, robo

- Deslealtad, hipiocresía, doblez de corazón, etc.

Así que es necesario que nos guardemos y santifiquemos la red en la que nos encontrámos. Pidamosle al Espíritu Santo para que nos una en la red correcta y que nos permita ser fieles en el reino de Dios.

La Biblia dice que en una ocasión, una sola red capturo a más de 150 peces y aún con ser tantos, la red no se rompio. Lo cual nos hace entender que si estamos unidos en la red de Dios, encontraremos bajo la guianza de Jesucristo, abundante pesca y gran bendición.

Acepta el reto de trabajar en red, sumar recursos para alcanzar mayores resultados para la gloria de Dios.

Así que hoy, si tu red familiar, ministerial o de amigos, se a roto, tienes la oportunidad para remendarla. Solo pide la ayuda del tejedor y remendador de redes que es el Señor Jesucristo y tendrán una nueva oportunidad.

Si por otro lado, no te encuentras unido a ninguna red, estas solo (por diversas causas), yo te invito que te unas a una red de Dios, para que tu trabajo y esfuerzo, obtenga mayores resultados que los que hasta ahora has obtenido. ánimo y Adelante